
Esta práctica es habitual en China en numerosos deportes, donde no se permite a los deportistas relacionarse o casarse hasta que sus preparadores lo consideran oportuno. El propio Wang Hao tuvo serios problemas en 2004, cuando comenzó a verse con Fan Ying, que fue expulsada del equipo nacional. Según parece Wang se salvó de ese destino por su alto ránking y potencial.